Los largos meses de cuarentena han generado una mirada diferente de los propietarios con respecto a sus viviendas y a la hora de buscar un nuevo lugar dónde vivir los llamados PH comienzan a tener una relevancia más importante que la que ya tenían. ¿Por qué? Porque esta particular mezcla de casa y departamento empieza a combinar los beneficios de unos y otros haciéndolos particularmente atractivos.
Cabe aclarar que éste fenómeno no es un nuevo, pero que sí estamos viendo que está tomando más fuerza aún, principalmente en barrios más alejados del centro de la ciudad.
Primero hagamos un poco de historia. Los hoy llamados PH tienen su origen en las viejas “casas chorizo” construidas principalmente entre 1880 y 1930 como respuesta a al crecimiento demográfico y físico del país. Esta tipología viene determinada por las transformaciones sufridas en Argentina partir de 1850 y es el resultado arquitectónico de las viviendas que construyó la oleada de inmigrantes europeos, mayoritariamente italianos y españoles, de clase media urbana. Primero como vivienda individual, una suerte de evolución de la “casa colonial” y luego como vivienda “multifamiliar” que derivó en muchos casos en los llamados “conventillos”. En todos los casos la característica principal era la sucesión de ambientes comunicados entre si y con salida a un patio común con una galería.
Hoy día llamamos PH al conjunto de viviendas individuales que comparten un mismo terreno generalmente dispuestas en Planta Baja y eventualmente también en Planta Alta, con una o varias entradas desde la calle.
Cuales son esas características que hace a los PH productos tan buscados?
- Existencia de patios y/o terrazas.
Un PH tiene mínimamente un patio a través del cual iluminan y ventilan el resto de los ambientes. Si la unidad no tiene otra encima, se potencia la posibilidad de contar con una terraza propia. El hecho de contar con una expansión abierta, ya sea patio y/o terraza, permite instalar una parrilla, solárium o pequeña piscina haciendo de esto un diferencial competitivo altamente valorado.
- Flexibilidad y posibilidades de crecimiento
Si el PH tiene cierta antigüedad, la posibilidad de reformarlo a gusto también es un atractivo que muchos buscan. A partir de la planta tradicional (varias habitaciones comunicadas entre sí con salida a un patio) las posibilidades son muchas y dependerá de las necesidades del cliente y la capacidad del profesional actuante para poder explotarlas al máximo.
- Techos altos
El atributo de los techos altos, dependiendo su altura, es un diferencial muy tentador a la hora de pensar en entrepisos que puedan aumentar la superficie del PH para ambientes como escritorios, salas de juegos, lugar de trabajo o ateliers. Entrepisos que balconean a un espacio mayor generan una espacialidad muy diferente que le dan un toque distinto.
- Bajo costo de mantenimiento
Una de las características más valoradas en este tipo de unidades es que no pagan expensas. A diferencia de los departamentos, donde este gasto es cada vez más elevado, en los PH hay pocos gastos de mantenimiento ya que no cuentan con encargando, ascensores ni amenities que suelen elevar las expensas considerablemente.
- Pocos vecinos
Contar con pocos vecinos y la mayoría dispuestos en “horizontal” a lo largo del terreno hace que las unidades sean más privadas y silenciosas. Y también a la hora de tomar decisiones referidas al mantenimiento de zonas comunes hace que haya menos voces para ponerse de acuerdo.
Los compradores de PH son una raza particular que buscan un “estilo de vida” diferente sin salir de la ciudad: independencia, privacidad, espacios abiertos, posibilidades de reforma, bajas expensas y una personalidad creativa que les permite ver más allá de lo que el producto ofrece.
Si te encontras en esa categoría de gente que busca «algo distinto» te puedo ayudar.
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